Investigadores revelan resultados de experimentos que determinan el tiempo de durabilidad del nuevo coronavirus, denominado SARS -CoV 2, en distintas superficies y en el aire.
La Dra. Bárbara Jacob, Investigadora residente del Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia – CIEP, nos explica una reciente comunicación científica publicada por la revista The new england journal of medicine, de los autores Dr. Neeltje van Doremalen y Trenton Bushmaker del Instituto Nacional de alergias y enfermedades infecciosas de Hamilton, y Dylan H. Morris, de Princeton University, Estados Unidos (DOI: 10.1056/NEJMc2004973 (2020).
El coronavirus humano “SARS-CoV-2”, llamado así por ser el sucesor del SARS CoV-1 “coronavirus del síndrome respiratorio agudo severo”, y comúnmente llamado HCoV-19, surgido en Wuhan, China, a finales de 2019, es el virus responsable de la actual pandemia que nos afecta.
La Investigación
Los virus son un tipo especial de partículas, las cuales podrían ser consideradas seres vivos debido a su organización y forma de existir. Sin embargo, la pregunta de si son o no son seres vivos sigue siendo un motivo de amplio debate.
Esta investigación analiza y compara cuánto tiempo permanece activo el virus SARS en el aire y superficies como el plástico, cobre, acero inoxidable y cartón. Durante un experimento realizado en laboratorio se utilizaron concentraciones umbrales de virus, similares a las encontradas en muestras obtenidas de las vías respiratorias superiores e inferiores de pacientes infectados. Los resultados alcanzados por el equipo de investigadores mostraron que los virus SARS-CoV-2 y SARS-CoV-1 se mantuvieron viables en el aire a lo largo de 3 horas, sin mostrar un decaimiento significativo en la infectividad del virus después de este período. Esto sugiere que ambos tipos de virus podrían perdurar por períodos superiores a 3 horas en el aire.
Los resultados en superficies mostraron que el SARS-CoV-2 fue más resistente sobre el plástico y acero inoxidable, y se detectó, que el virus fue viable hasta 72 horas después de la aplicación a estas superficies. La investigación muestra que la viabilidad más larga de ambos virus fue en acero inoxidable, con una vida media de 5.6 horas, y en plástico una vida media de 6.8 horas. Sin embargo, en superficies de cobre no se midió ningún SARS-CoV-2 después de 4 horas mientras que los resultados en superficies de cartón fueron más ruidosos, lo cual implica una mayor incertidumbre en la interpretación de los datos.
¿Por qué el SARS-CoV-2 da lugar a más casos de infección con consecuencias mortales?
Las conclusiones arrojaron que la permanencia de ambos tipos del virus SARS son similares, sin embargo, las evidencias emergentes muestran diferencias epidemiológicas entre ambos tipos de virus y que las causas pueden deberse a las altas cargas virales en la parte superior de las vías respiratorias, además, de que las personas infectadas con el SARS-CoV-2 pueden transmitir el virus mientras están asintomáticas. Esto explica por qué las medidas de control del virus SARS-CoV-1 han sido más efectivas que las medidas para el control del virusSARS-CoV-2.
Medidas a tomar en cuenta
A diferencia del SARS-CoV-1, la mayoría de los casos secundarios de transmisión del virus del SARS-CoV-2 parecen estar ocurriendo en entornos comunitarios, donde los centros de atención de salud también son vulnerables a la introducción y propagación del SARS-CoV-2, en aire y superficies, el virus, como bien sabemos, se propaga por partículas invisibles a nuestros ojos, a través de gotas de estornudos o tos de personas infectadas, las cuales pueden estar asintomáticas y ser portadoras, estas partículas puedes ser tocadas o respiradas por otras personas y contraer rápidamente el virus.
Por lo anterior, se recomienda encarecidamente la desinfección y limpieza constante de superficies que pueden estar expuestas al virus SARS-CoV-2 como a otros virus, recordando que no debemos exponernos a tener que asistir a centros de atención de salud. Frente a la sospecha de estar afectado por el virus es recomendable contactarse vía telefónica, de esta manera, poder aplicar un primer diagnóstico y posterior tratamiento sin exponerse a uno ni a otros al contagio. Y sobre todo el aislamiento, debido a las probabilidades de contagio en la exposición a recintos masivos, no interactuar en ambientes distintos a los usuales, es decir, evitar salir de los hogares a menos que sea estrictamente necesario, restringir reuniones sociales y tomar estrictas medidas de higiene. Ya que como los estudios indican, la viabilidad del virus es altamente resistente por varias horas en superficies y aire.
Dra. Barbara Jacob, Investigadora residente del Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia – CIEP