El Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia (CIEP) presentó la Guía de Campo Arqueológica de Puerto Raúl Marín Balmaceda, un proyecto que busca rescatar la identidad y memoria territorial de esta localidad ubicada en la entrada norte de la región de Aysén. Financiada por el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, la guía sintetiza más de siete meses de investigación y colaboración comunitaria.
El estudio incluyó la localidad de Puerto Raúl Marín Balmaceda y su borde costero aledaño constituido por la desembocadura del río Palena, el estuario Pitipalena, el Brazo Pillán y el río Rodríguez. Durante este proceso se registraron importantes hallazgos arqueológicos, como conchales, restos humanos, herramientas de piedra y corrales de pelillo. La participación activa de la comunidad local, a través de relatos orales y el apoyo del colectivo cultural Mujer Austral de Raúl Marín, fue fundamental para identificar los puntos de interés del territorio, una metodología denominada arqueología comunitaria.
En la guía de campo, producto final de este proyecto, se registran 29 sitios arqueológicos, los cuales se pueden encontrar en 3 zonas; Bolsillo lagartija, Los Leones, Península Coca y Añihué. Como también encontrarán descripciones de los diferentes tipos de sitios como conchales, osarios, líticos y corrales.
El lanzamiento se realizó el pasado viernes 17 de enero de 2025 en el Museo Regional de Aysén, donde se destacó la importancia del proyecto para comprender las trayectorias humanas en la zona. Según Constanza Roa Solís, directora del proyecto, arqueóloga del CIEP e investigadora asociada del museo, el objetivo principal era poner en valor el patrimonio arqueológico de la región y conectar la historia reciente con su pasado.
“La verdad es que Aysén tiene una historia en el interior de al menos 12 mil años y en la costa de alrededor de 6 mil años, entonces uno de los intereses de esta investigación fue vincular lo que es la historia reciente de la localidad con la historia remota y cómo su pasado prehispánico se relaciona con las poblaciones que se movieron por la costa y los fiordos desde hace más de seis mil años”, explicó Roa.
En una etapa posterior del proyecto, se ordenó esa información para la planificación de prospecciones por el borde costero, es decir, explicó Constanza Roa de CIEP, “acudimos a los sitios señalados para la caracterización y registro de los lugares arqueológicos y luego con toda esta información georreferenciada construimos esta guía de campo donde buscamos resumir los hallazgos de una forma amigable y didáctica para entregársela a la comunidad”.
Durante el evento, Ricardo Álvarez antropólogo y académico de la Escuela de Arqueología de la Universidad Austral de Chile, quien fue invitado para hablar de otras experiencias de investigación que ha realizado en Cabo de Hornos y Chiloé por cerca de 8 años. Álvarez destacó el valor de integrar el conocimiento local con la investigación científica:
“En nuestra investigación hemos acompañado a comunidades locales que están interesadas en resguardar y difundir su patrimonio ya que como académico uno complementa esa información, pero sin borrar el conocimiento local que es lo más importante. Se rescata el sentido que tiene para ellos los objetos, las costumbres de sus localidades; la idea es complementar el conocimiento científico con el local, y ver cómo eso refuerza la adhesión, el apego, sobre todo con los lugares que están siendo tan intervenidos hoy en día”.
La Guía de Campo Arqueológica de Puerto Raúl Marín Balmaceda es un testimonio del esfuerzo colectivo por preservar el patrimonio cultural de Aysén y un puente entre el pasado y el presente de esta emblemática región. Para descargar esta guía puedes ingresar a www.ciep.cl y acceder a su versión digital.
